Peñarol debutó en la LDD superando (91-85) a Quimsa, último ganador del certamen.
En el comienzo de la temporada 2018/2019, el primer desafío interesante llegaba en el juego inicial, ni más ni menos, para Peñarol. El campeón defensor, Quimsa de Santiago del Estero, visitó anoche el Microestadio Domingo Robles. Para el “Milrayitas”, era la oportunidad de ratificar el nivel que deslumbró en la primera parte del pasado torneo. Y aún más: la chance para sus jugadores de seguir demostrando que están en nivel LNB.
Los cinco titulares que alineó Tomás Sirochinsky forman parte de la rotación de Leo Gutiérrez en Liga. Salvo Valinotti (quien aprovechó la lesión de Gianella en el Súper 20) y Gorosterrazú en los últimos partidos, al resto le costó llegar a los diez minutos en cancha en cada juego (exceptuando a Juani Marcos, base suplente en LNB, quien no vio acción en el debut de la Liga de Desarrollo). Por eso, más allá de los objetivos grupales –secundarios en esta competencia- los chicos buscaban mostrar que están aptos para aportar. Y uno de ellos, vaya si lo demostró…
Peñarol fue regular en su ofensiva. Empezó marcando 22 puntos en el primer parcial y se sostuvo por encima de la doble decena en los restantes cuartos. Si bien Quimsa comenzó a fluir en el tercer período (marcó 29 tantos) y le desnudó algunos desacoples defensivos, el local encontró antídotos en su ataque con sus tiradores en acción.
Gorosterrazú y Monacchi completaron diez triples entre ambos. El segundo, no sólo lastimó a distancia. La producción de Tomás fue inagotable en la faceta anotadora, con su habitual potencia camino al aro y un buen porcentaje con respecto a lo intentado (11/17 de cancha y 5/6 en libres). En el último cuarto, Manuel Castellani (habitual armador de la Primera local, relevo de Valinotti para la ocasión) y Guido Patrizzi (buena talla, proyecto de las inferiores del Club) tuvieron minutos en el cierre y le sumaron confianza al entrenador, aprovechando sus oportunidades. Peñarol culminó una victoria con sabor a revancha propia y presagios de un nuevo torneo alentador, donde buscará llegar más lejos como equipo y ratificar el proceso satisfactorio de sus individualidades.
Síntesis:
Peñarol (91): Valinotti, Gorosterrazú 16, Monacchi 33, Fernández y Franco (FI). Castellani 2, Cabrera 6, Framiñan 6, Patrizzi 4 y Duarte 0. DT: Sirochinsky.
Quimsa (85): Allende 6, Araujo 8, Barra 14, Bracho 33 (X) y Burgos 10 (FI). Trucco 8, Méndez 6 y Ruiz 0. DT: Caballero.
Parciales: 22-15, 43-36 y 66-65.
Árbitros: Rodríguez – Vicente (Mar del Plata).
Cancha: Microestadio Domingo Robles (Peñarol).
Jugadores destacados:
Tomás Monacchi (Peñarol): el escolta tiene un torneo a su pedir. Mientras busca su hueco en LNB, donde los bases y escoltas LDD han ganado minutos, aprovechó el primer juego de una nueva competencia de desarrollo para mostrar lo que puede dar. Tremendo despliegue físico y un tiro certero, mejorado desde la línea de tres puntos (6/10). Completó sus estadísticas con 33 puntos, 4 rebotes, 3 asistencias y 5 recuperos.
José Javier Bracho Escobar (Quimsa): el venezolano (20 años) intentará tomar vuelo en esta competencia, para meterse de lleno en la rotación LNB de Silvio Santander. Exhibió en Mar del Plata su buena mano (5/9 de tres puntos) y su talla (1,88), con ventaja en la posición de escolta/alero para rebotear (ocho en total ante Peñarol). Proyecto interesante, otro extranjero más en la competencia…
Lucas Gorosterrazú (Peñarol): una pequeña muestra de sus cualidades, reservadas a pleno para la Liga. Es que el rosarino fue la grata sorpresa del Súper 20 para el “Milrayitas” y espera más chances en el equipo profesional. Su alta confianza quedó evidenciada en su efectividad vs Quimsa en LDD (6/10 de campo en 21’). ¿Le seguirá ofreciendo buenos minutos Leo Gutiérrez en LNB? Depende de él, conoce el camino para ganárselos.
