Así lució Peñarol para vencer 60-54 a Kimberley por la Liga Junior. Escapó en el primer tiempo y aguantó la arremetida del “Dragón”, quedándose con el triunfo.
Los antecedentes y las ausencias desestimaban cualquier tipo de resultado lógico en la previa del juego. Kimberley había ganado el duelo en el primer partido de la Junior y como en el certamen provincial, festejado en el Valentín Pérez ante Peñarol por el Torneo local. Pero en el inicio de los encuentros de “vuelta” en la primera fase de la Liga Junior, se vislumbraba una historia aparte.
Sin Bednarek y Del Hoyo de un lado, ausentes Sigismonti e Iriart del otro, los planteles perdían jerarquía individual y la ecuación en los emparejamientos sacaba otros cálculos. En esa línea tomó la posta y se erigió como figura Franco Vinciguerra. El alero estuvo intratable en el primer tiempo (16 puntos), lapso donde Peñarol sacó 20 de distancia. Kimberley se mantuvo en el cuarto inicial gracias a Franco Maeso, sin embargo un flojo score de 6 tantos lo dejó atrás en la segunda manga (41-21).
Al regresar del descanso largo, el “bicho verde” ajustó las tuercas y ensambló, de a poco, la reacción colectiva. La defensa individual sobre Vinciguerra, los cambios defensivos con agresividad y robos en el traslado del adversario luego de presionar a cancha entera, le inflaron más el ánimo que el tanteador a los dirigidos por Imanol Hernández. El tercer período finalizó 49-39, y aunque Kimberley desperdició tiros libres para situarse en una brecha de un dígito, había logrado cambiar la dinámica del cotejo.
En el arranque de los últimos diez minutos, Thiago Dasso se encargó de tomar las riendas. El base “milrayita” acumuló faltas en el rival, aceptó generarse sus propios disparos y se involucró como ladero de Vinciguerra en ofensiva. Las segundas chances de Maeso y las penetraciones de Mansilla fueron los argumentos de la visita, que a falta de 53 segundos estaba -7. En ese momento, Miqueas García sorprendió con un triple y la remontada estuvo más cerca que nunca (58-54). Kimberley recuperó en la siguiente jugada, pero Peñarol resistió en su defensa posterior negando el lanzamiento del “Dragón”, hasta ofrecerle el más incómodo de los tiros al conjunto verdiblanco.
Con el balón en sus manos y 15” en el reloj grande, el “Milrayitas” liquidó el pleito desde la línea, con simples de Bronzini y Framiñán, adueñándose de una victoria doblemente positiva: por el triunfo en sí, y la diferencia a su favor que le queda como saldo en los enfrentamientos con Kimberley (ganó por 6, había perdido por 2).
Síntesis:
Peñarol (60): Dasso 16, Lorenzo 4, Bronzini 8, Vinciguerra 24 y Patrizi 4 (X) (FI). Framiñán 4 y Figueroa 0. DT: Sirochinsky.
Kimberley (54): Valdés 5 (X), Genga 0, Arenal 10, Mansilla 13 y Maeso 22 (FI). García 3, Lucini 1, Boyne 0, Hinojal 0 y Andre 0. DT: Hernández.
Parciales: 20-15, 41-21 y 49-39.
Árbitros: Pagani – Aquino.
Cancha: Microestadio Domingo Robles (Peñarol).
