El Super 8 ya tiene sus finalistas, el local Peñarol y Libertad de Sunchales ganaron sus respectivos partidos y hoy buscaran el título en el Polideportivo Islas Malvinas.
Ambos equipos jugaron el miércoles la primer jornada del Torneo y tenían un día de descanso con respecto a sus rivales que habían hecho lo propio el día jueves.
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En el primer turno Libertad superó con claridad 85-68 a Regatas de Corrientes con un impecable juego en equipo durante el segundo tiempo, que le permitió quebrar la paridad de los primeros 20 minutos (38-32) donde no se podían sacar ventajas. La clave estuvo en el goleo repartido del equipo de Sunchales que tuvo cinco jugadores con más de 10 puntos y en las pérdidas del equipo dirigido por Casalanguida (19 contra 10 de su rival).
El máximo anotador del partido fue el jugador de Libertad Juan Fernández Chávez con 17 puntos (3/6 en triples y 4/4 en dobles), seguido por su compañero Alejandro Alloati con 16 (6/8 en dobles y 4/5 en libres). Mientras que por el lado de los correntinos apareció Javier Martínez con 13 pero se destacó el mal porcentaje en triples (29% con 5/17), una de las armas vitales de un equipo que no encontró un abanderado del gol en ningún momento y en el segundo tiempo padeció el cansancio del día anterior.
Más tarde se vio sin duda el partido que todo amante del básquet quería ver. Peñarol y Obras se enfrentaban en una semifinal que prometía mucho por los ricos planteles de ambos, más allá de lo diezmado que venía el Milrayitas. Y no se quedó atrás, ya que el local ganó un emocionante partido por 83-81 y consiguió el pasaje a la final que tanto buscaba, gracias a un tremendo tapón de Martín Leiva sobre Martín Osimani en el último segundo, para evitar el suplementario.
En el mejor partido que dio el torneo hasta el momento, los marplatenses lograron recuperar parcialmente su identidad de juego, donde el banco de suplentes juega un papel muy importante y donde Leonardo Gutierrez es protagonista. Pero del otro lado estaba Obras, que venía de jugar el día anterior aunque no es escusa debido al enorme plantel que tiene y la calidad de sus jugadores(de hecho no se notó el cansancio) que lucharon hasta el último segundo del partido.
En un encuentro donde Peñarol estuvo arriba en el tanteador durante casi los 40 minutos, Leo Gutierrez estuvo intratable y convirtió 24 puntos (19 en el primer tiempo), seguido por su amigo Andrés Nocioni con 14, que salió por cinco faltas al ser superado en el duelo individual por el extranjero de Obras, Dartona Washam, que convirtió 27 puntos (4/5 en triples, 6/11 en dobles y 3/4 en libres) y lo volvió loca al Chapu que terminó el partido muy cansado.
Las claves para llevarse la victoria fueron varias, debido a la cantidad de vías de gol que tiene el equipo dirigido por Julio Lamas. La buena marca sobre Juan Gutierrez fue muy importante, ya que solo pudo convertir 11 puntos y se preocupó más por protestarle a los árbitros que por jugar. Por otro lado, el tirador Julio Mázzaro terminó el partido sin puntos (0/4 en triples y 0/2 en dobles) y sus lanzamientos boqueaban el aro pero no entraban. Mucho mérito para el Milrayitas que supo mejorar su nivel y vencer al rival más difícil de la competencia, a pesar de no estar en su mejor momento deportivo.
Ahora queda la hora de la verdad, claramente el candidato es Peñarol por ser el campeón de la Liga, el mejor equipo de los últimos años en la competencia y por tener a un NBA como el Chapu Nocioni. Pero a no confiarse, porque del otro lado esta Libertad que se encuentra en un gran momento en cuanto a su juego en equipo, donde todos aportan su granito de arena y no tiene nada para perder en este partido ya que hizo un Torneo impecable torneo hasta el momento.
Los duelos dentro de la cancha serán varios, pero el juego interior será uno de los puntos más importantes del partido y probablemente el que pueda ganar ese rubro, será el que tenga más chances de ser campeón. Leiva y Battle son dos de los mejores pivots de la Liga en los últimos años, y más allá que el nacional ganó los últimos duelos, el extranjero se encuentra en un gran momento y buscará revertir esa estadística. Solo queda esperar unas horas para ver un gran partido, una final que no parecía la esperada, pero sin duda es muy merecida para ambos y como dicen algunos: “En la cancha se ven los pingos…” .
