
La nota está firmada, pero el sentimiento es de todo el ambiente del básquet, y por que no, del deporte argentino. Heriberto Pablo Schonwies murió anoche a los 74 años. Se fue un prócer del básquet nacional.
Fue uno de los grandes entrenadores de nuestro básquet. Dirigió mas de 160 partidos en Liga A, consiguiendo el título de la Liga de transición con San Andrés en 1984. También dirigió a la Selección Argentina en la década del ’70, con la que ganó un Sudamericano.
Tuvo su paso por Mar del Plata, dirigió a Peñarol en la LNB 92/93 e hizo debutar a Fernando Rodríguez ese año, un histórico del Club.
Es una costumbre hablar bien de la gente que muere, pero de Heriberto siempre escuché cosas buenas, de todos lados. Solo una vez lo vi personalmente, fue en el Club Peñarol hace poco más de un año en un Cuadrangular de Liga Junior (el llegaba con Obras). Sólo crucé un par de palabras con él, estaba Oscar Sánchez también quien veía a su hijo, Alejo que estaba en Peñarol.
Apenas me acuerdo, cual fue el tema de conversación, pero lo que si recuerdo claramente es que me quedó la imagen de un buen tipo. Lo cual es justamente lo que todos rescatan de él.
En los últimos años se desempeñaba como Profesor de Técnica Individual en el Club Obras. Quienes si lo conocieron en serio además de su don de persona, destacan su capacidad para enseñar. Un verdadero maestro se fue y aquí lo recordamos…
heriberto, un grade del basket argentino.
Hasta siempre heriberto, Un gigante del basquet
Es si asi PATO !! ……….UN GRAN FORMADOR , Y UN GIGANTE COMO SER HUMANO !!!!………..HASTA SIEMPRE MAESTRO !!!
Te recuerdo de todos los campus del Huevo , pero mis mayores recuerdos parten de por el año 72-74 cuando en los torneos de Verano ibas a dirigir a San Lorenzo de Chivilcoy, llevaba a Burtin y Bonichini ( que jugaban en Ferro) y se armaban aquellos tremendos partidos contra Racing reforzado con los hermanos Pagella y luego por el 80 mas o menos cuando dirigia al Poderosisimo Obras y en la Plata se arman aquellos partidos tremendos contra Gimnasia.
El Basquet debería hacerte un monumento Heriberto