
Parecía que Peñarol se llevaba el Clásico de Liga Junior pero Quilmes dio el golpe sobre el final.
Quilmes le ganó 81-76 a Peñarol por la 11ra fecha de la Zona Sur 1 de la Liga Junior. La visita dominó buena parte del juego de la mano de un Juan Ignacio Marcos en modo Liga Nacional, sin embargo el Tricolor usó sus energías de reserva para llevárselo en el cierre.
Sin ventajas para ninguno de los dos fue el inicio del partido. En 5 minutos el 9-10 para Peñarol lo demostraba con un Bednarek lastimando en la zona pintada y Quilmes apoyándose en la tarea de Martín. Sin embargo Juani Marcos empezó a calentar motores y con 9 puntos y 2 asistencias le dio más vuelo al juego milrayitas ante un cervecero que aguantaba producto de su juego exterior con Echague, aunque el cierre de la visita fue mejor para quedarse con el primer cuarto 14-20.
Un nuevo triple de Marcos inauguraba el segundo parcial, pero rápidamente el local ajustó la marca sobre el base, le cortó el circuito con sus compañeros y del otro lado encontró a Nally en la pintura además de los 5 puntos de Skidelsky para reaccionar y acortar la brecha a la mínima (25-26) obligando a Sirochinsky a pedir minuto. Peñarol salió mejor a la cancha y con Vinciguerra y Del Hoyo a la cabeza corrigieron el rumbo de la visita en un puñado de ofensivas. Pero Skidelsky manejaba los hilos de su equipo de muy buena manera, sumaba, encontraba a Nally y Quilmes se mantenía cerca de un Peñarol que otra vez tuvo un mejor desenlace de cuarto de la mano de Marcos (37-40).

Peñarol salió al segundo tiempo con un equipo bajo pero rápido para usufructuar la transición. Lo pudo hacer y además contó con Juani Marcos que confirmaba su momento de Liga Nacional marcando la diferencia en todos los sectores de la cancha pero sobre todo en ataque donde llegan a su sexto triple (en 7 intentos) y así darle a la visita la máxima (45-56). De todas formas, Quilmes no demoró en aprovechar el descanso del base milrayitas y casi automáticamente metió un parcial de 9-2 para acercarse 54-58. Algo que terminó siendo un susto ya que la bomba fue desactivada luego del tiempo muerto visitante y con la vuelta a la cancha de…si, Juani Marcos. Como un imán atrajo las marcas y Peñarol lo disfruto nuevamente castigando con Mateo del Hoyo (56-63).
Vinciguerra se anotaba en el goleo visitante con 7 puntos para transformarse en una preocupación adicional para la defensa Tricolor (62-71). A fuerza de atacar el aro, Quilmes empezó a recobrar terreno y con un parcial de 6-0 volvía a acechar a su rival y con la misma receta llevo el partido a 74-74 con un minuto por jugarse.
En la misma línea jugó esos últimos 60 segundos. Llegó al final del juego obligando a Peñarol a cometer todo tipo de errores. Por primera (y casi única vez en la noche) Marcos no pudo sumar en el uno contra uno, tampoco Vinciguerra que llegaba derecho con el aro a distancia. Del otro lado a pura fuerza Ecker se ganaba sus puntos y desde la línea el local terminó dándole cifras definitivas al juego.